Los medios tradicionales de comunicación en Colombia, radio, prensa y televisión son monopolizados por grandes firmas empresariales que
complementan su trabajo industrial con los mensajes expresados en los medios. Así la necesidad de expresión de ideas diferentes a las planteadas en los medios masivos de comunicación se evidenciaba en las fachadas de lugares de alto transito en la ciudad; Los graffiti, sten
cil, murales y carteles eran cada vez más usuales entre los grupos ciudadanos que pensaban diferente, pero que no tenían espacios y mucho menos medios para difundir sus pensamientos.
La comunicación alternativa era una opci
ón, pero el mantenimiento de un espacio radial, de un programa o canal de televisión o la impresión de un periódico o revista resulta muy costoso para un medio dirigido a pequeños grupos de personas como es lo alternativo. Adicional está el contexto político y militar colombiano que son sensibles a las críticas hechas en los medios y terminan actuando criminalmente contra periodistas y detractores.
La aparición de la internet y sus
facilidades para trabajar con audio, videos e hipertexto equilibro un poco la ba
lanza, aunque la ventaja sigue estando de lado de los mass media pues según cifras de Indexcol
La penetración de Internet en los niveles socioeconómicos altos alcanza un 80% y
en los niveles medios, el 60%. En los niveles bajos alcanza el 30%, pero es en ellos en los que se registran mayores crecimientos y se prevé que en poco tiempo alcancen el 50%, la des
ventaja existe tenien
do en cuenta que Colombia es un país conformado
principalmente por estratos bajos.
La politización de los medios masivos de comunicación y la pretensión de intereses particulares, características propias de las empresas privadas como lo son, los canales, periódicos y emisoras nacionales impedían la in
teracción con el receptor y conocer sus necesidad
es de información. El auge de las nuevas tecnologías y la construcción de medios virtuales pusieron a los medios tradicionales en una encrucijada, porque tenían que disponer espacios para la libre expresión de ideas de sus seguidore
s como lo hacían los nuevos medios alternativos virtuales.
Además en un mundo posmoderno en donde prima la subjetividad es necesario otorgar espacios de expresión en los que las personas se sientan libres y autónomas. La web 2.0 convirtió la utopía en realidad; las autopistas de información ya tenían
lugar de llegada para usuarios y empresas con intereses de interacción
comercial, cultural, académicos y más. Las redes sociales son espacios importantes en la vida del país. En cifras Colombia
es el país de Latinoamérica que más ha incorporado las redes sociales, junto a Brasil. Es el país número 11 del mundo en número de usuarios en Facebook, y también tiene un alto número de usuarios en Hi5, Sonico y Windows LiveSpaces). Este año despegó Twitter (aunque se estima que no hay más de 150.000 usuarios), y en diciembre de 2009 alcanzó los 100.000 usuarios en la red social profesional LinkedIn.
Las redes sociales se han convertido en extensiones de las ciudades. En épocas de elecciones la publicidad política inunda las redes y permite la participación activa de los usuarios desde sus ideologías. Según Manuel Castells “la mayor parte de movimientos sociales y políticos del mundo de todas las tendencias utilizan Internet como una forma privilegiada de acción y de organización (…) Internet es un instrumento de comunicación que permite la flexibilidad y la temporalidad de la movilización, pero manteniendo al mismo tiempo un carácter de coordinación y una capacidad de enfoque de esa movilización”.
La internet es una herramienta global que se entrega a todas las personas, está permite el desarrollo de novedosos proyectos y la interacción cultural, económica y académica. Algunos grupos insisten en clasificarla como responsable de la deshumanización actual otros la ven como un dios que todo lo sabe y todo lo puede, en realidad la red de redes debe ser vista como un instrumento de trabajo y no para la que se trabaja; para José Arias Ordoñez director y editor de la Revista Interamericana de Nuevas Tecnologías de la Información el desarrollo nacional está muy ligado a la participación en este mundo de redes e intercambios en conocimiento.
